sábado, 24 de diciembre de 2011

Casi 2012...

Casi 2012...época de balances acerca del 2011, el año en el que casi me divorcio, el mismo en el que casi me fundo, aquel en el que casi pierdo todo y en el que varias veces casi hubiera preferido estar muerto.

Por suerte el mismo en el que nada de eso finalmente pasó. Y no pasó porque tuve el temple, la paciencia y también la mano invisible de Dios que me acompañó en cada uno de esos momentos difíciles y me levantó no ya 2 o 3 veces sino varias veces más. Es increíble esa sensación horrible de sentir que lo estás perdiendo todo y no tener a mano un extinguidor para apagar las llamas mientras estas consumen lo mucho, poco o nada que te queda.

Pero también hay un aprendizaje en todo esto y en mi caso claramente fue el de aprender a perderlo casi todo, a poder imaginarme y reinventarme de vuelta desde la nada misma sabiendo que tal vez al día siguiente no tuviera realmente nada. Y ahí es adonde veo que la mano de Dios me jugó a favor, porque al momento que deje ir todo, todo se me fue dando de vuelta de otra manera. Nunca tan cierta la frase "la mano de Dios aprieta pero no ahorca".

Y entre las cosas que se me fueron dando está también el reencuentro con el pasado, con los afectos, con aquellos con los que compartiste un pedazo chico o grande de la vida. Fue realmente increíble entonces encontrarme con mis compañeros de colegio Esquiú la semana pasada y hacer un recorrido 360 del pasado.

Porque uno guarda los recuerdos que le quedan (jamás me voy a olvidar de un 3-1 con un gol esquivando a Sola que era 2 años más grande), pero también es muy importante sumar los recuerdos colectivos de los demás para componer la imagen. Y encontré de todo: estaba Mercedes Corté que se acordaba de la primera vez que fui con pantalones largos al colegio, ya bien entrado 7mo grado, Paula Colombo que me recordó que "no podía cruzar solo la calle cabildo", Pama que me confesó que me sospechaba inteligente y el que casi me ahorca ya entrado en la adolescencia. (anónimo, porque es una cuenta por obvios motivos saldada)

Una colección de anécdotas que realmente enriquecen mi historia personal y me permiten en todo caso conocerme mejor y dar gracias a Dios de estar vivo para poder justamente reecontrarme conmigo mismo y con ellos para recorrer nuestras historias e imaginarnos en un futuro.

Completamente sorprendido y deslumbrado además de las increíbles vidas de los demás: Ines es surfer, Tano empresario, Tita millonario, Piccini músiKo...en fin, toda una colección de perfiles que jamás hubiera imaginado al momento de abandonar el colegio, en mi caso 3 años antes de la graduación.

Creo también que fue ese cambio tan traumático en cierta manera, el que me permitió hacer pié en este 2011 tan turbulento. No porque hubiera quefido quedarme en el colegio en el que casi me ahorcan aunque ya ni me acuerde de eso, sino por el cambio en si mismo. Nunca es fácil arrancar de 0. Lo hice en el 88 y 23 años después la tuve que remar de vuelta.

En cualquier caso, muy feliz navidad para todos Uds. que me acompañaron no solo en este 2011 difícil sino a lo largo de los 38 años y monedas de existencia. En mi caso está bastante claro, el 2012 va a ser mucho mejor...!

lunes, 5 de diciembre de 2011

Un problema de probabilidades

Si es cierta la teoría esa que dice que sólo el 50% de nuestras decisiones son correctas, cabría preguntarse como se da la distribución de dicho porcentaje.

Basado por ejemplo en la teoría de la concatenación supongo que las malas decisiones se van hilando de forma que de golpe sumaste muchas malas decisiones todas juntas y después tal vez revertís y empezás a tomar otras mejores.

Es que una vez que tomaste una mala decisión, solo te queda elegir entre "malo" o "peor". "Malo" muchas veces es aceptar que elegiste mal y volver al estadío anterior mientras que peor es negar dicha realidad y seguir tomando decisiones asumiendo que la primer decisión fue correcta hasta que finalmente aceptás el error y desistís o seguís perdiendo.

Hay solo algo bueno en tomar malas decisiones: de acuerdo con la teoría solo el 50% de tus decisiones son malas, lo que equivale a decir que si tomaste muchas malas, seguramente empieces a tomar buenas decisiones en breve.

En todo eso estaba pensando hoy haciendo un racconto de todas las malas decisiones que he tomado de un tiempo a esta parte y regodeandome en lo brillante que va a ser mi futuro toda vez que llevo acumuladas un montón de malas decisiones.

Desafortunadamente caí en el siguiente pensamiento que me dejó angustiado por el resto del día: que tal si las malas decisiones que tomé en realidad no eran las malas? Vale decir, quién me garantiza que decidí mal? Los resultados actuales? Tal vez esta magra campaña es la buena y ahora me toca una mucho peor...

En fin, mi única conclusión es que decidas lo que decidas y pase lo que pase, no hay que quejarse demasiado, porque siempre se puede estar peor. y sino, preguntenle a los amigos de River que pensaban que ya había pasado lo peor.

Acerca del autor....

Acerca del autor....
MillenniumMan es el primer Cyberhero del mundo. Llega al planeta tierra en un repollo nocturno, disfrazado de chicharrón. Deja atrás su vieja presencia anodina para transformarse en un ser social agradable que solo es feliz destruyendo paradigmas. Se convierte en ícono social atendiendo a cuanto evento lo invitan. Sale de tapas reiteradamente y encara mujeres como si fueran cervezas. Su hobby favorito es jugar tenis y vivir según sus propias reglas. Funda este blog para generar conciencia y abrir las mentes de los lectores. Lo que antes era solo una posibilidad, hoy es una realidad y mañana un hecho consumado...su visión no tiene límites y no le teme a nada más que los murciélagos. Enemigo declarado de las autoridades del país, se radica en el exterior desde donde planea su retorno para construir un mundo mejor para todos.