Con tanto ruido acerca del valor actual del barril de crudo y el oro y su proyección, me detuve un tiempo a pensar cual de todos los bienes es el más escaso y por ende, el que más valor a futuro va a tener. En realidad estaba tratando de ver adonde pongo los dineros provenientes del piquete de la abundacia, pero ese es otro tema.
La conclusión que obtuve fue bastante interesante: curiosamente el bien más escaso, aquel que tiene la oferta menos elastica, porque no se puede producir más es el tiempo. Tu tiempo, mi tiempo tienen un límite. En función de eso, y de la utilidad que obtengamos en la actividad emprendida, estamos dispuestos a usarlo de alguna u otra manera.
Por ejemplo, no tengo ningún problema es dejar todo para ir a jugar un partido de tenis, y muy por el contrario, tenés que darme algo muy valioso para mi para que cancele ese partido.
De igual manera, funciona un poco el universo. El tiempo que le dedicás a tu trabajo, equivale a lo que vos percibís que te están pagando por el mismo. Si en algún momento considerás que te pagan poco, reclamarás o buscarás otro trabajo que te pague lo que vos querés. Si en cambio te dan un aumento, seguramente estés dispuesto a sacrificar un poco más de tu tiempo libre para trabajar un rato más.
La pregunta entonces es: dado que es un bien tan escaso, que hago yo perdiendo el tiempo escribiendo está pavada? A lo que respondo: lo mismo que vos leyéndola...entregando algo de mi tiempo a distraerme un rato. Y sabés que? Me parece bien...
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