De Colón y otros marineros perdidos en altamar...

Ya pasados 15 meses desde mi llegada a Berlín o mi partida de Buenos Aires según como se vea, es un buen momento para hacer un balance. Y siempre comparo mi viaje con el de Colón, un poco porque lo admiro infinitamente y otro poco porque me imagino que habrá tenido los mismos desafíos que tengo yo multiplicados por 5 millones de millones. Lo mío es un simple grano de arena en la playa de los emprendedores, pero me ayuda a entender perfectamente lo que puede haber sentido Don Cristóbal a cada momento.

Empezando por el motín a bordo cuando no aparecían los resultados y la tropa pensaba que se iba a caer donde se terminaba el mar. Lo difícil de ser algún tipo de emprendedor no es conseguir un financista. Eso es solo el comienzo y si buscás bien, seguramente encontrás. Lo difícil es todo lo demás. Y todo lo demás es además de mostrar los resultados, lograr que los que te acompañan en el proyecto pongan el 110% de su energía y que se la aguanten cuando las cosas no salen exactamente como lo planearon cuando zarpó el barco.

Es lo que le pasó a Colón: consiguió la plata, reclutó a los marineros, y mientras alcanzó la comida todo iba bien. Pero cuando la comida se terminó y la tierra no aparecía y aún mucho antes de que los inversores reclamaran nada, los que lo acompañaban empezaron a dudar. Y cuando eso pasa hay muchas chances de que todo se venga abajo. Porqué las embarcaciones no volvieron al puerto de palos? Tal vez justo antes de que se tomara esa decisión aparecieron algunos rastros de tierra, como una rama o algo. O tal vez porque aún prisionero de la tropa logró comunicar mejor las decisiones durante el período de incertidumbre.

Yo no tengo una tropa de marineros ni 3 barcos. Hay solo 1 Señora y 2 niños que se la pasan preguntando: ya llegamos papá? Y mi respuesta es siempre la misma: todavía no, pero ya vamos a llegar. Porque como me demostró Colón y me enseño mi viejo, en la vida con esfuerzo, todo llega. Dicen por ahí que la paciencia “hace el monje más monje”.

Y a diferencia de Colón, yo si puedo leer el diario on line y darme cuenta que dar vuelta la dirección del barco en estos momentos no parece ser la mejor decisión. Espero tener su capacidad para comunicarlo a mi tropa, aún prisionero.

Capitán Millenniumman – Marinero 2.0 y aventurero de los de antes…